Los gobernadores de San Juan, Marcelo Orrego; Mendoza, Alfredo Cornejo; Salta, Gustavo Sáenz; Catamarca, Raúl Jalil, y Jujuy, Carlos Sadir, conformaron la mesa del cobre, con el objetivo de impulsar acciones en común, que permitan el desarrollo productivo del sector. En ese contexto, marcaron como prioridad que el Senado apruebe el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), cuestionado por la oposición.
Los propios protagonistas reconocen que es un espacio netamente político, que -al igual que la mesa del litio- busca marcar los temas centrales para el desarrollo de proyectos vinculados al cobre, de la mano de grandes inversiones internacionales. “La minería no deja de ser una definición política”, dijo Orrego a este medio.
El gobernador ofició casi de anfitrión, porque la mesa se conformó en el marco de la Expo Minera San Juan. Los mandatarios provinciales mantuvieron una reunión previa a puertas cerradas, luego firmaron el documento conjunto y volvieron a reunirse de manera privada. Los cinco apoyan no solo el RIGI sino también la Ley Bases.
“Estamos convencidos de que el momento para que se concreten las inversiones reales en cada una de nuestras provincias, es ahora. Manifestamos fervientemente la defensa y soberanía de nuestros recursos naturales, y desterramos las ideas de solo reflejar en títulos y acciones públicas inversiones y valores que no llegan en beneficios a nuestro pueblo. No podemos seguir esperando que proyectos, algunos con más de 50 años, queden bajo tierra. Nuestras provincias necesitan avanzar en la construcción de estos proyectos de manera inmediata porque eso significa empleo, desarrollo, divisas y crecimiento”, plantearon en el acta constitutiva.
Como el litio, el cobre también tiene su mesa
Los gobernadores señalaron que el punto seis del conocido como Pacto de Mayo que propuso el presidente Javier Milei -que finalmente se firmaría en junio o julio- plantea el “compromiso de las provincias de avanzar en la explotación de los recursos naturales del país”. Si bien acompañan, ratificaron que son propiedad de las provincias.
Según cifras que maneja la mesa, el 40 % de la oferta mundial de cobre se encuentra en la Cordillera de los Andes, compartida entre la Argentina, Perú y Chile. Solo para nuestro país tendría un potencial de generación de divisas de entre US$20.000 millones y US$25.000 millones en la próxima década, pero para eso, aseguran que es necesario incentivar las inversiones.
“El momento es ahora, esperamos el compromiso y el fuerzo de quienes hoy son los titulares de proyectos con mayor grado de avance hacia su construcción. El sector minero es estratégico para el desarrollo de nuestras provincias y el bienestar de nuestros pueblos, no se puede seguir esperando”, plantearon en un documento conjunto tras la conformación de la mesa.
Pero gran parte de la oposición cuestiona el RIGI. El peronismo, porque considera que desincentiva las pequeñas inversiones, y el radicalismo vinculado al senador Martín Lousteau, porque cree que pone en desventaja a las pymes proveedoras de esas grandes multinacionales beneficiadas por los incentivos fiscales. Para los bloques de izquierda, el problema viene de la mano de la concentración económica y del extractivismo.
Sobre ese último punto ponen el eje algunos mandatarios. “Explotar ese cobre y explotarlo en de la mejor manera que se hace en el mundo y que esa industria que es la minería sustentable nos permita desarrollarnos como provincia y contribuir al crecimiento del país”, señaló Cornejo durante el acto de firma del acta constitutiva.
“Los gobiernos provinciales venimos haciendo los esfuerzos políticos necesarios con marcos regulatorios y fiscales para garantizar el desarrollo de la actividad. Con los proyectos de cobre en estadios avanzados radicados en nuestro país, nos impele a coordinar estrategias para su pronta construcción. Con las garantías ambientales adecuadas, una mirada de desarrollo social inclusivo, con respeto a las comunidades, integración de proveedores nacionales y la mirada puesta en maximizar la creación de empleo local en nuestras provincias; seguiremos trabajando en brindar las condiciones adecuadas para la inversión en estos proyectos”, planteó el acta conjunta que firmaron los cinco mandatarios.
Defensa del RIGI
A partir de la conformación de la mesa, los cinco gobernadores que la integran buscan “trabajar de manera mancomunada para la armonización de condiciones que propicien e impulsen el desarrollo de la minería de cobre”.
El planteo es claro, hay un contexto internacional de precios favorables y una proyección hacia el aumento de demanda del mineral clave para la transición energética, pero también la advertencia: “los recursos naturales, está establecido en la Constitución, que son de las provincias”, dijo Orrego, aunque remarcó que “el Gobierno nacional siempre termina muy beneficiado por las exportaciones”
“Hoy hay una ventana de oportunidades económicas, porque hay grandes inversiones en el mundo. El precio del cobre en todas sus proyecciones va en aumento gracias a esta enorme demanda y no explotarlo, no sacarlo rápidamente sería un pecado capital para la Argentina y un pecado no sacarlo para las provincias, que son propietarias de ese recurso”, planteó también Cornejo. Para el gobernador mendocino, “el desorden macroeconómico ha sido la principal restricción para los proyectos en las provincias”.
Orrego agregó que “el RIGI es importante para toda la producción” y advirtió que “si no se aprueba es malo para todos, no solo la minería, porque es una ley que nos beneficia a todos”